03 abr 2024
Historia clínica
Mujer de 34 años que acude con un médico de la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, quien recién llegó a vivir a esta ciudad. La paciente refiere dolor de garganta asociado con otros síntomas de infección del tracto respiratorio superior. También comenta un largo historial de dolores de cabeza, dolores en diversas partes del cuerpo y molestias musculares, palpitaciones e insomnio. Ha sido sometida a varios procedimientos quirúrgicos por enfermedades menores. Al hablar con ella y a partir de las notas médicas, el médico descubre que es una refugiada que huyó de la Sierra chiapaneca. Su primera lengua es el tzotzil y su español es básico: con esto puede hacerse entender por el médico, pero no es posible tener una conversación más profunda acerca de su salud.
Sin embargo, de la lectura de notas anteriores de la paciente se desprende que huyó de Socoltenango después de que su marido y su madre fueran asesinados y ella fuera violada durante los incursiones entre facciones de grupos delictivos que asolan la región. Llegó a San Cristóbal de las Casas y de ahí se trasladó, con el apoyo de la comunidad, hasta la capital del estado. Vive con una familia tuxtleña y ayuda en el hogar y con los niños.
Tras una simple anamnesis y un examen de la paciente, el dolor de garganta parece ser de origen viral y el médico le prescribe paracetamol, líquidos abundantes y evitar el esfuerzo durante unos días. Sin embargo, la mujer se muestra llorosa y triste, por lo que el médico se preocupa por ella y la cita para 1 semana después. No es muy comunicativa, pero está dispuesta a volver para hablar más sobre su salud, en particular sobre sus síntomas físicos y su insomnio.
Preguntas
· ¿Cuáles son las posibles causas de sus dolores de cabeza e insomnio?
· ¿Cómo podría el médico saber más sobre lo que le está pasando?
· ¿Qué sería útil explorar en las evaluaciones iniciales?
· ¿Qué servicios resultarían de ayuda en una evaluación y tratamiento adicionales?
Comentarios
Puede haber una causa física para sus dolores de cabeza y su insomnio, pero la etiología más probable es un problema de salud mental. Para ello, tanto el médico como la paciente necesitan un intérprete. La paciente no tiene familiares en Tuxtla. Tiene amigos en su vecindario que hablan bien español, pero el médico sospecha que quiere hablar sobre asuntos privados que no le gustaría que sus conocidos supieran. El médico también preferiría contar con un intérprete capacitado que la paciente no conozca.
Se localiza a un intérprete de tzotzil capacitado en el servicio comunitario de interpretación local que podría acompañar a la paciente en la siguiente cita. Acuerdan volver a reunirse para hablar dentro de 2 semanas y el médico le pide al personal de recepción que le programe una cita previa de 30 minutos con el intérprete para explicarle el caso y estar preparados para la consulta con la paciente.
El médico revisa un estudio publicado que reveló que los problemas de salud mental más comunes que sufren los refugiados chiapanecos son la depresión y la ansiedad, y que un alto porcentaje de ellos sufre trastorno de estrés postraumático (TEPT). Encuentra también en Internet que es posible que estos pacientes no accedan a la atención sanitaria o revelen problemas de salud mental por miedo a ser estigmatizados por su comunidad, ya que es una percepción común en este medio que la enfermedad mental es incurable.
El médico también descubre que en la sierra de Chiapas existe la creencia de que es mejor no pensar en experiencias traumáticas y que a la paciente puede no gustarle la idea de mantener terapias de conversación.
Con estos datos, en la segunda consulta el médico se centra en la salud mental de la paciente. Después de algunas conversaciones, el médico, con el consentimiento de la mujer, la remite al servicio de salud mental local para una evaluación inicial. Finalmente, programa otra reunión con ella y el intérprete dentro de 1 mes, en la cual planea centrarse en la salud física de la mujer.
Puntos clave
• Se debe estar consciente y ser sensible a las creencias culturales de cada paciente.
• En estos casos, debe buscarse detenidamente al intérprete más adecuado.
• La complejidad de las presentaciones clínicas y psicológicas de algunos pacientes puede requerir varias consultas.
• Es un requisito previo generar confianza en el paciente para brindar una atención eficaz, especialmente en un paciente que ha sufrido abuso en una situación en la que los médicos y el Estado no siempre son dignos de confianza.